El sector lácteo francés y el bienestar animal

Ahora es el turno del vacuno de leche y de Francia. En esta oportunidad han sido la interprofesional láctea francesa (CNEIL), en colaboración con su homóloga del vacuno de carne (INTERBEV), las que han puesto a punto 16 indicadores de bienestar animal, con el objetivo de poder valorar el nivel de bienestar de las vacas de aptitud leche y la actuación de los ganaderos.

Los 16 aspectos que se van a considerar en cada explotación son los siguientes:

  • Una evaluación global de la ganadería para conocer la el nivel en que se satisfacen las necesidades de las vacas.
  • Evaluación de la condición corporal de las vacas (grasa subcutánea) en el cuarto trasero.
  • Evaluación de la disponibilidad y funcionalidad de los bebederos para conocer la satisfacción de las necesidades de agua de las vacas.
  • Evaluación de la piel de las vacas para ver la ausencia de placas secas en las áreas en contacto con el suelo y la ubre (rejilla Normabev).
  • Estimación del área de descanso disponible para las vacas.
  • Control de la presencia de abrasiones, lesiones y otras anormalidades en las vacas.
  • Evaluación de posibles formas anormales de desplazamiento o de posturas analgésicas (tomada para aliviar el dolor) en las vacas.
  • Verificación de la concentración de células somáticas del tanque.
  • Evaluación del número de mastitis clínicas presentes en el rebaño.
  • Cálculo/registro la mortalidad de las vacas y de las muertes fetales (terneros fallecidos en las 0-48 h posparto).
  • Evaluación del registro sanitario de las vacas que debe proporcionar el ganadero.
  • Evaluación junto con el ganadero las prácticas que se han puesto en marcha para el manejo del dolor.
  • Analizar con el ganadero sus prácticas en la distribución del calostro.
  • Analizar la posibilidad de que cada vaca se mueva libremente y tenga acceso a un área de ejercicio.
  • Evaluación de las medidas aplicadas para hacer frente en la explotación a un golpe de calor, al viento, a la humedad y a las alteraciones criptoclimáticas.
  • Evaluación de a qué distancia puede acercarse el evaluador sin desencadenar una respuesta de rechazo por parte de las vacas.

Por su parte, la industria se ha decantado por la utilización del modelo Boviwell, que se fundamenta en los umbrales definidos en el programa de referencia europeo Quality Wellfare. El mismo se basa en un sistema de puntuación para cada indicador y proporciona resultados para cada una de los 5 derechos fundamentales de los animales y una puntuación final de 0 a 100, que también permite analizar cada uno de los resultados.