El número de vacas lecheras mayores de 24 meses no llega a las 850.000 lo que significa que en producción pude haber una media de 700.000 vacas (un 1,2 – 1,3 por 100 menos que el año pasado). De ellas, sólo un 58 por 100 está en la Cornisa (39 por 100 en Galicia, 9 por 100 en Asturias, 8 por 100 en Cantabria y 2 por 100 en el País Vasco). El número de novillas en el pasado mes de octubre es de 282.952 animales, un 2,1 por 100 menos que en el mismo mes del año 2017 (datos del MAPA).

Ahora la organización agraria de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha presentado un estudio comparativo entre el precio de la leche que cobran los ganaderos en los diferentes Estados de la Unión Europea. El resultado que ha obtenido esta organización es que los ganaderos españoles cobran más de veinticinco millones de euros menos que si recibiesen el precio medio pagado en Europa.

UPA se ha dirigido a la Federación Nacional de Industrias Lácteas (FENIL) para denunciar “el acoso económico en el que vivimos los ganaderos”, y ha pedido al Gobierno que rompa los contratos lácteos que no cumplan la legalidad. Dice la UPA que “son necesarios contratos justos que nos hagan salir de la espiral en la que estamos”.

La UPA también ha señalado que “la consecuencia de los precios hundidos de la leche es que cuatro ganaderos del sector lácteo de ovino, caprino y de vacuno abandonan la actividad cada día” y ha afirmado que “la situación es tan límite que muchos productores y productoras de leche están enviando sus animales al matadero”. Por esta razón, la organización señala un descenso considerable en el precio de la canal de carne de vaca, una bajada de entre 0,30 y 0,50 euros del precio por kilo.

Tal vez sea el momento de recordar aquí las veces que el profesor Buxadé ha manifestado que, en general, los contratos lácteos iban a ser y son, en sí mismos, ineficientes e ineficaces y que la FENIL no era lógicamente, ante la falta de una cadena de valor, una organización realmente útil para los ganaderos, que estuviera especialmente interesada en que se pagaran unos precios adecuados a los ganaderos por su leche ni por velar por sus intereses empresariales.

Para muestra, un botón: en el mes de octubre la media del precio de la leche en la U.E. era de unos 33,70 cts. /litro (esto sí casi un 5 por 100 más bajo que hace un año); en España, en el mes pasado, el precio medio era de 30,50 céntimos de euro por litro; es decir, casi 5,5 ptas. menos (sic).