Los precios a que se paga la leche a los ganaderos

El precio de la mantequilla está subiendo de manera importante en la UE, como se expone en este mismo boletín. Por esta razón el precio medio de la leche en la granja de la Unión Europea aumentó un 3,3 por 100 en julio a 34,2 céntimos de euro; este precio es un 25 por 100 superior al de julio de 2016 y 6,8 por 100 superior al promedio de los últimos 5 años. En 21 Estados miembros, los precios mejoraron en comparación con el promedio de 5 años. En Agosto, en 16 Estados de la Unión el precio volvió a subir el 2,1 por 100.

No obstante, en España no ha acontecido lo mismo. De ahí que la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) haya denunciado que España está entre los países de la Unión Europea en los que peor se paga la leche a sus ganaderos. UPA ha explicado que la causa está en que muchas industrias imponen a los ganaderos contratos con un precio fijo de la leche, lo que pone en graves aprietos a las explotaciones de vacuno lechero de nuestro país.

Actualmente, el precio medio que reciben los ganaderos por la leche de su vacas (referido a la “leche tipo”) oscila alrededor de los 0,31 – 0,315 euros/litro lo que le sitúa en el último cuarto de todos los Estados de la U.E. – 28.

Según la UPA, la causa de la mencionada situación está en que muchas industrias imponen a los ganaderos contratos con un precio fijo de la leche, incluso en contratos de mediana y larga duración. Con esta medida, las industrias impiden que el precio de la leche en origen evolucione, en contraposición a lo que ocurre en el resto de Europa.

Las industrias, especialmente las grandes, siempre según la UPA, “hacen caer la balanza de los precios medios que recoge el FEGA, el Fondo Español de Garantía Agraria, en el que tienen un gran peso”.

Esto agrava el problema expuesto porque causa también problemas en los contratos de las pocas empresas que utilizan indexación o referenciación de precios, ya que muchos de estos están parcial o totalmente referidos al FEGA.

Por todo lo expuesto hasta aquí, la UPA ha denunciado que “si las grandes industrias mantienen precios bajos es imposible que el conjunto del sector despegue mientras se permita la referenciación al FEGA”.

La organización ya ha manifestado su queja a la Federación de Industrias Lácteas (FENIL), que representa a una mayoría de empresas lácteas, para que exija a las mismas actualizar los contratos a precio fijo por renovación o acuerdo mutuo de las partes y ha denunciado la situación ante el Ministerio y la AICA y les ha recordado las características que deben cumplir los índices de referenciación.

Además, la mencionada organización agraria se ha referido a los informes de la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) que instan a intervenir para resolver el problema generado con este índice.

Una vez más se pone de manifiesto, como tantas veces se ha denunciado en este mismo boletín, la ineficiencia y la ineficacia de los “contratos lácteos”. Nacieron mal y funcionan mal.