Las claves del Bienestar Animal en el ovino de leche de alta producción

Garantizar el bienestar de los animales es una demanda creciente de la sociedad actual que puede aportar en un futuro próximo un valor añadido a la calidad de los productos, además de ser un condicionante de la productividad, ya que sólo cuando los animales están en un grado adecuado de confort se pueden lograr unos niveles óptimos de producción.

Este aspecto que adquiere especial importancia en los sistemas más intensivos como es el caso de la explotación de ganado ovino de leche de alta producción en condiciones de estabulación permanente, que se ha desarrollado con fuerza en los últimos años en nuestro país, utilizando para ello razas especializadas, en rebaños de gran tamaño y alimentados con raciones de alta densidad proteica y energética.

En este marco y teniendo en cuenta la creciente restricción en el uso de medicamentos preventivos, la optimización del bienestar de los animales adquiere un papel protagonista favoreciendo las mejores condiciones ambientales, de manejo y en las instalaciones, que permitan un estado sanitario adecuado, evite la presencia de residuos en los alimentos, optimice las producciones y con ello garantice la sostenibilidad de los sistemas productivos.

Para ello son necesarios indicadores que permitan valorar el bienestar animal como base para establecer planes de mejora en los puntos débiles detectados. Sin embargo, disponer de una metodología fácil y rápida que permita evaluar el bienestar de los animales es un condicionante actualmente y un reto a la hora de su aplicación en las explotaciones.

En este sentido nuestro grupo de trabajo ha colaborado con el Grupo Nanta en el desarrollo de protocolos para evaluar el bienestar del ganado ovino de ordeño a partir de 15 indicadores representativos y fáciles de valorar en condiciones prácticas de explotación, divididos en cuatro bloques:

  • Ambientales (temperatura, corriente de aire, ventilación y ambiente cargado).
  • Manejo (densidad animal, calidad de la cama, confort de los animales, animales estresados, estado de las pezuñas y limpieza de los animales).
  • Instalaciones (comederos pienso, comederos paja y bebederos).
  • Alimentación (condición corporal y consistencia de heces).

 

Puntuación calidad de cama

Cada bloque se puntúa en una escala de 10 puntos de peor a mejor valoración y ponderando posteriormente su importancia para obtener una valoración de cada bloque y del bienestar global de la explotación.

 

Puntuación bebederos

Analizando estas puntuaciones y su relación con aspectos productivos se observa que son las explotaciones de tamaño pequeño las que reúnen, en general, peores condiciones de bienestar en las instalaciones, siendo este mismo indicador el que marca diferencias entre regiones. Se observan correlaciones significativas y positivas (p<0,05) entre los indicadores de bienestar estudiados y parámetros productivos (temperatura vs contenido en grasa y EQ de la leche, calidad de la cama vs litros producidos/animal y día, limpieza de los animales vs producción EQ/día y bienestar en las instalaciones vs producción diaria de leche) y negativas (p<0,05) para la relación de los animales estresados vs contenido en células somáticas.

Los resultados de este trabajo muestran que, con las puntuaciones subjetivas analizadas, es posible establecer diferencias en la valoración del bienestar animal entre explotaciones de ganado ovino lechero en función del tamaño, la localización geográfica y los parámetros productivos. Además, la valoración del bienestar animal en las explotaciones incita a que los servicios técnicos se fijen en parámetros que pasarían desapercibidos en una visita rutinaria.

   
Mª Paz Lavín González.

Científica Titular. IGM-CSIC. Finca Marzanas

José María Bello Dronda

Jefe Producto Ovino-Caprino NANTA SA