La raza bovina Murciano-Levantina: Presente y futuro (I)

En esta primera parte de nuestro artículo, vamos a exponer la ubicación y las variedades de la raza bovina Murciano-Levantina (ML) que recibe el nombre de su Comunidad Autónoma originaria, adquiriendo también el sinónimo de Levantina, por extender el área geográfica a zonas limítrofes del Levante peninsular (Alicante y Almería).

Se trata, pues, de una raza autóctona de la Región de Murcia, que actualmente presenta un número de ejemplares inferior al medio centenar y está considerada en situación crítica, según la Sociedad Española de Recursos Genéticos Animales (SERGA) en base a criterios FAO. Indicar que la filogénesis de esta raza no es conocida ni se considera hoy posible de deducir, dado que su caracterización morfológica es distinta a la de las restantes razas bovinas españolas (tampoco se encuentra ninguna otra raza similar en el marco mediterráneo).

La mayor parte del censo de esta raza radica en Murcia, encontrándose, como ya se ha mencionado, algunos ejemplares en las provincias limítrofes. Sin embargo, el número de animales en pureza racial está disminuyendo, a medida que aumenta el de individuos cruzados. La llegada de la maquinaria agrícola a la zona de huerta supuso una manifiesta pérdida de utilidad práctica de estos animales, siendo la principal responsable de la fuerte disminución del censo de ejemplares que la componían.

Debe tenerse en cuenta que la aptitud de trabajo era una característica manifiesta de la raza bovina Murciano-Levantina; a la misma debía unirse históricamente una buena producción cárnica (carne de alta calidad organoléptica) y el aprovechamiento de sus deyecciones como fuente de abono (su mantenía “estacada” en las casas de la huerta con lo cual se controlaban la producción de las mismas).

De esta raza existieron cuatro variedades: La variedad Huertana o Cristiana, utilizada en labores agrícolas; la variedad Lorquina, con funciones de transporte de mercancías, tirando de carretas y en labores agrícolas, y las variedades Almazoreña y Calasparreña, muy usadas en el arado en los campos y en el arrastre de minerales. Los pocos ejemplares que aún quedan pertenecen a la variedad Calasparreña, de mayor tamaño y que fue muy utilizada en la tracción y transporte de áridos.

El prototipo de la raza ML está definido en el BORM nº 132 del 11/06/2010, por el que se aprueba la reglamentación específica del Libro Genealógico de esta raza bovina.

La situación genética en la que se encuentra la raza hace que las instituciones oficiales la mantengan en situación de protección especial y que todos los ejemplares sean sometidos a un programa de conservación según el R.D. 2129/2008, de Conservación, Mejora y Fomento de las Razas Ganaderas.

El objetivo del programa es conservar y recuperar la raza bovina ML, dado que es un recurso genético animal insustituible y es un patrimonio genético ganadero que hemos de preservar para las generaciones futuras.

 

 Dr. Salvador Ruiz López

Dpto. Fisiología. Facultad de Veterinaria. Universidad de Murcia.

Dr. Ángel Poto Remacha

Equipo de Mejora Genética Animal. IMIDA. Murcia.