La informatización de la gestión en el ordeño: sus claves

Los datos que se generan durante el ordeño son importantes para poder evaluar de forma objetiva, no sólo el rendimiento de la instalación sino de los propios trabajadores que llevan a cabo el ordeño.

Hasta el momento pocas instalaciones disponen de programas informáticos de gestión de salas de ordeño. Es frecuente que, en caso de existir dicho programa, los responsables de la explotación no sepan evaluar correctamente la información que éste les proporciona. Además, los programas informáticos no son capaces de evaluar el factor humano, esto es, la labor de los ordeñadores durante la permanencia de los animales en la sala de ordeño.

Para poder obtener el mayor número de datos objetivos de la rutina preordeño, el ordeño y el postordeño en aquellas explotaciones que carecen de sistema informático, o para complementar la información de los programas de la sala, hemos diseñado una “app” para tablets orientada a que los técnicos de calidad de leche puedan optimizar la recogida de datos.

Para poder obtener datos de calidad es importante mantener en correcto estado no sólo el sistema informático sino las instalaciones de ordeño.

  • El software de gestión del ordeño debe mantenerse correctamente actualizado.
  • El hardware destinado al programa de gestión debe tener las necesidades indicadas por el fabricante del software.
  • Los medidores y las conexiones con el programa de gestión deben estar en buen estado para asegurar la correcta recepción de los datos.
  • En caso de disponer de sistema de identificación animal, tanto los sensores como los transponders de cada animal, como las antenas o receptores deben funcionar correctamente para asociar cada dato a cada animal.

Para evaluar el correcto funcionamiento del ordeño es necesario conocer o disponer de los datos de producción total, a los 2 minutos y residual, además de otros parámetros.

De la rutina preparto hay que conocer el tiempo de preparación de los animales antes de la colocación de la unidad de ordeño. Con este valor se puede tener evaluado y medido el trabajo de cada operario al preparar los animales. Se conoce de esta manera el tiempo entre cada una de las fases de la rutina preordeño y el tiempo total de la rutina.

Durante el ordeño es importante conocer los flujos parciales a distintos intervalos y el flujo medio. Estos datos permiten elaborar la curva media de eyección de leche. Los flujos parciales, cuanto más elevados mejor, no debiendo estar por debajo de unos valores según se trate de explotaciones que realicen 2 ó 3 ordeños. Durante los 120 primeros segundos de ordeño, los valores de los flujos parciales deben ser ascendentes. De esta manera se asegura que no habrá un porcentaje elevado de ordeños con flujos bimodales.

Flujos medios elevados se traducen en tiempos de ordeño cortos lo que a su vez reduce el tiempo de permanencia de los animales en la sala de ordeño y de las pezoneras colocadas en las vacas.

Tras el ordeño, es útil conocer el tiempo que transcurre desde que cada animal se acaba de ordeñar hasta que la puerta de la sala se abre y pueden abandonarla. Este tiempo, junto al que cada lote de animales en ordeño tarda en abandonar la sala, permiten mejorar el rendimiento del ordeño.

Es importante entender cómo cada modificación de la rutina en nuestra explotación afecta a la evolución de los parámetros de ordeño. Por lo tanto, si se dispone de datos del ordeño es más útil trabajar con pocos parámetros pero bien asimilados, que perderse en un listado infinito que no permite poder extraer conclusiones útiles.

   
Alejandro López Castiello.
ALPAVET SLP.
App CronoMilking.
Antonio Callejo Ramos.
Dpto. de Producción Agraria.
ETSIAAB UPM