La evolución del precio del porcino en España
Como ya se había puesto de manifiesto con anterioridad (véase, por ejemplo, la Jornada TOP GAN Porcino que se celebró el pasado mes de junio en el marco del Palacio de Congresos en Zaragoza) el imparable y, en cierto modo, descontrolado aumento de la producción porcina en nuestro país iba a comportar situaciones complicadas a nivel de mercados y de precios. Y así está siendo.
En el momento de escribir estas líneas, el precio al que se cotiza el lechón de 20 Kg. está alrededor de los 30 euros unidad. Bien es cierto que está situación es bastante similar a la que se observa en la mayoría de los mercados europeos y es debida a tres causas, fundamentalmente. En primer lugar, la oferta supera claramente a la demanda interior (que está, en general, en retroceso, en parte debido a la finalización del periodo estival, con los correspondientes efectos sobre la demanda del norte de la U.E., y también del turismo en el sur de la U.E.) lo que hace al sector más sensible a los mercados exteriores.
En segundo lugar, se ha acrecentado la competencia entre los grandes exportadores del porcino (entre los cuales España es el referente) para conquistar cuota de mercado, lo que está originando, como es lógico bajo estas premisas, una situación de bajada de precios a la que contribuye, como también era previsible, la presión que realizan los países importadores (empezando por China) para rebajar los precios de sus compras.
En tercer lugar, ante esta situación, las industrias cárnicas, por una parte, están reduciendo significativamente su demanda a los productores (con todo lo que ello supone) y, por otra, están desestimando congelar, ante una visión cortoplacista de precios a la baja. Todo ello lleva a los mercados a una espiral bajista clara. Dónde está el suelo de esta espiral es difícil de ver ahora, porque dependerá en gran medida de la reactivación significativa de las compras por parte de China.
Y, para acabar de hacer aún más complejo este marco, está la competencia que ejercen en los mercados internacionales Canadá, Estados Unidos (cuyo mercado también está sujeto a grandes caídas en el precio del porcino) y Brasil (cuyo afán exportador es bien conocido), que, además, cuentan con la ventaja de un dólar que sigue estando del orden del 4,5 – 5 por 100 por debajo del euro, lo que añade una dificultad más a los exportadores de la Unión Europea.
En definitiva, se espera que las próximas semanas no van a ser fáciles para los porcicultores españoles, pero tampoco para los de la Unión Europea