Encuesta acerca de la opinión pública sobre la agricultura

La Dirección General de Agricultura ha llevado a cabo, a finales del año 2017, una nueva encuesta con el objetivo de analizar cuál es la opinión pública sobre la agricultura, las áreas rurales y la PAC. Dicha consulta fue respondida por un total de 28.000 ciudadanos europeos pertenecientes a los 28 Estados miembros (EE.MM.). Se trata del denominado “eurobarómetro” y la última encuesta está en la misma línea de encuestas anteriores (que se vienen realizando cada dos años desde 2007).

Entre los resultados obtenidos en la mencionada encuesta, cabe destacar que más del 90 por 100 de los consultados considera que la agricultura y las zonas rurales son importantes para el futuro; concretamente, un 53 por 100 las considera muy importantes y el 39 por 100 cree que son importantes; en 19 de los 28 EE.MM. de la U.E. la mayor parte piensa que son muy importantes.

Para la mayoría de los encuestados, la principal responsabilidad de los agricultores y de los ganaderos es la de proveer a los ciudadanos de una amplia variedad de alimentos de alta calidad, sanos y seguros. La segunda responsabilidad de los mismos es la de garantizar el bienestar de los animales; en este ámbito de responsabilidades también se incluyen el proteger el medio ambiente y afrontar el cambio climático.

Es importante resaltar que los encuestados tienden a pensar mayoritariamente que las cuestiones relativas a agricultura y desarrollo rural deberían tratarse a nivel europeo. Esto se debe a que consideran que es la mejor forma de garantizar que los alimentos sean seguros, sanos y de alta calidad.

Por otra parte, más de dos tercios de los encuestados tiene constancia de la ayuda que proporciona la Unión Europea a los agricultores y ganaderos a través de la PAC. En este ámbito, un 10 por 100 de estas personas conoce detalles de la PAC; un 57 por 100 sabe que existe, pero desconoce los detalles, y un 32 por 100 nunca ha oído hablar de ella (lo que no deja de sorprender).

El 60 por 100 de los encuestados está de acuerdo en que la PAC beneficia a los europeos y no únicamente a los agricultores y ganaderos. Casi las tres cuartas partes consideran que la PAC cumple su rol de asegurar un suministro estable de alimentos a la Unión Europea. Cuando se trata de garantizar que los alimentos sean seguros, sanos y de alta calidad y que su manera de producirlos sea sostenible un 60 por 10 está de acuerdo.

En lo que se refiere a las prioridades de la PAC, más del 80 por 100 de los encuestados considera importante fortalecer a nivel europeo el papel del sector agrario en la cadena alimentaria, así como fomentar el desarrollo y la investigación con el fin de apoyar al sector agroalimentario y el promover la incorporación de jóvenes.

La mayoría de los participantes (un 90 por 100) es de la opinión de que está plenamente justificado reducir los pagos a aquellos agricultores que no cumplan con los estándares de seguridad alimentaria. Un 88 por 100 está de acuerdo en reducirlos cuando no se respeten los estándares de bienestar animal. En este marco, casi el 90 por 100 de los encuestados está a favor de que haya pagos por realizar prácticas beneficiosas para el medioambiente.

Por otra parte, los estándares de protección medioambiental, tanto animal como vegetal, y los estándares de calidad son consideraros prioritarios para los ciudadanos, para los agricultores y para los ganaderos e, incluso, para la propia PAC. La mayoría se muestra de acuerdo con que estos estándares deben aplicarse también a los productos importados. Concretamente, un 87 por 100 de los 28.000 encuestados considera que solo deberían llegar a los mercados de la Unión Europea aquellas importaciones que cumplan con los estándares europeos.

Para más de las tres cuartas partes de los encuestados, entre los factores que ayudan a decidir qué productos comprar se encuentran la tradición local, el área geográfica y una etiqueta de calidad específica. Sin embargo, el actual conocimiento de los consumidores acerca del tema de las etiquetas no es muy alto. Así, resulta que el logo más conocido es el de Comercio Justo (un 37 por 100) seguido del de Agricultura Ecológica (un 27 por 100) y de las etiquetas de indicación geográfica (un 20 por 100). Datos que siguen siendo lamentablemente bajos.

Lo que este último eurobarómetro deja claro es que aún queda mucho trabajo por hacer en el seno de la ciudadanía de la Unión Europea en lo que se refiera al conocimiento de la trascendencia e importancia del quehacer de nuestros agricultores y de nuestros ganaderos.