El Parlamento Portugués y los toros

Una vez más, el tema de prohibir las corridas de toros llegó al Parlamento de Portugal. Es preceptivo recordar aquí que todas las propuestas de ley anteriores presentadas en la cámara lusa para abolir la Tauromaquia, suprimir las ayudas estatales o prohibir su retransmisión en la televisión pública terminaron fracasando.

En esta oportunidad ha sido el partido animalista portugués (PAN) quién llevó al parlamento luso el tema de la prohibición de las corridas de toros. En efecto, el diputado André Silva, del Partido de las Personas, los Animales y la Naturaleza (PAN), defendió que el proyecto de ley venía motivado “por la convicción de que el entretenimiento nunca puede anteponerse al sufrimiento de un animal”. El señor Silva adujo que “solo ocho países permiten hoy en día este tipo de maltrato, debido a que resulta imposible ver una corrida de toros y obviar que se esté torturando a un animal. Menos del 10 por 100 de los portugueses asisten a este tipo de espectáculo”.

Según el señor Silva, “la ciudadanía ha dejado de identificarse con esa violencia sin sentido. La gente muestra cada vez mayor empatía con los seres indefensos, siendo imposible justificar la muerte a cambio del entretenimiento”. Además, según el PAN, “esta propuesta legislativa obligará a los partidos a mostrar su verdadero rostro con respecto a la defensa de los derechos de los animales, permitiendo a los ciudadanos averiguar a quien están dando su apoyo en las urnas”.

La realidad ha sido que el Parlamento Portugués votó muy mayoritariamente en contra de la propuesta del PAN que, como se ha indicado, pretendía abolir las corridas de toros en el país. Así pues, con los votos del Partido Socialista (PS), del Partido Social Demócrata (PSD), del Partido Popular (CDS) y del Partido Comunista (PCP), el intento prohibicionista no ha salido adelante. El proyecto antitaurino solo contó con los votos favorables del único representante del PAN, del Bloque de Izquierda y de Los Verdes.

Entre los argumentos de los grupos en contra de la prohibición, desde el PCP, su representante, la señora Ángela Moreira, señaló que: «El PAN no admite que haya otras culturas, solo admite sus patrones culturales. El camino es el respeto por la identidad cultural».

Por su parte, el señor Joel Sa, del PSD, sostuvo que no es «oportuno ni adecuado hacer cambios en una materia en la que hay varias opiniones». Asimismo, Hugo Costa, miembro del PS, calificó el proyecto del PAN como «radical», posicionándose «al lado de la libertad y la tolerancia». Por su parte la señora Heloísa Apolonia, del PEV, recordó que «las corridas de toros tienen indudablemente una raíz cultural».

La votación contó con la presencia de numerosos aficionados y profesionales del mundo del toro portugués, que siguieron desde las galerías del Parlamento la votación.

Obviamente el Partido Animalista Portugués no dejará de volver a intentarlo en cuanto le sea posible.