PPA-PPB-PPC

En plena campaña electoral en el noreste, una vez concluida la montanera del cerdo ibérico en el suroeste, estas siglas sonarían a partidos políticos, pudiendo pensar en que forman del ABC de la política nacional: PP&Asociados, Psoe-Podemos-Bildu y Psc-Podemos-Ciudadanos. Bien saben, los que bien me conocen, que este tema no me incumbe, y por lo tanto no voy a opinar, ya que ni siquiera tengo clara la diferencia entre partido político y político partido. Tampoco me voy a dedicar a dar jarabe democrático ni a arañar a nadie (scratches=arañazos,) pensando en que sean los intereses contrapuestos lo mismo que nos une y nos separa. Es más, sigo votando al abulense Adolfo Suárez González, doctorado, sin plagio, en derecho por la Universidad Complutense de Madrid, que fue presidente del Gobierno desde 1976 a 1981, además de gobernador civil de Segovia entre 1968-69, mi tierra, donde recuerdo perfectamente su visita a la modesta casa de mis Padres y su conversación sobre temas agrarios en la mesa de la cocina con mi Padre. Persona Política Clave (PPC bueno) en el periodo de transición, liquidando las Cortes franquistas, legalizando los partidos políticos, aprobando la Constitución de 1978 y tratando en todo momento de buscar consenso entre todos, sin exclusiones. Dimitió motu propio in senso estricto, lo que hasta donde recuerdo ha sido el único en hacerlo y con menos motivos que todos los que le han seguido en el cargo dentro del orden democrático. Por lo tanto, mi voto sigue siendo para el Centro Democrático y Social, tres palabras con las que me identifico. Aunque siento decir que cada vez que he ido a votar habían quitado de las mesas electorales las papeletas de dicho partido, por lo que ahora solo me queda una de esas iniciales en el partido demócrata de los Estados Unidos, quien ganó las elecciones el pasado 3 de noviembre 2020 con más de 81 millones de votos sobre los 74 millones de los republicanos, los escasos dos millones del partido Libertaria y menos de un millón de otros partidos e independientes, sobre una población de algo más de 328 millones de habitantes. Tengo que confesar también que la vicepresidenta demócrata Kamala Harris me provoca mejores vibraciones que el conjunto de las tres vicepresidencias de nuestro propio gobierno. ¿Sabría alguien explicarme por qué? No entiendo muy bien como en nuestro país con menos del 15% de la población de los Estados Unidos tenemos el triple de vicepresidencias, así como un 45% más de ministerios (22 ministros frente a los 15 americanos). Quiero pensar que se debe a mi gran ignorancia en estos asuntos, o bien a que estoy confuso, al hilo de lo cual, ya el confucianismo como base del buen gobierno del Estado se basaba en la caridad, la justicia y el respeto a las jerarquías, resaltando como máximas virtudes la tolerancia, la bondad, la benevolencia, el amor al prójimo y el respeto a los mayores y antepasados, como principios de una sociedad próspera. Para tratar de entenderlo mejor quiero inspirarme en el segundo presidente americano más votado de la historia de los EEUU, también demócrata, con 69 millones de votos, Barack Obama que, sin duda, a mi entender, está más próximo a Confucio que a las iniciales del título de esta columna de opinión.

 

Ya Aristóteles en el siglo IV a.C. en su libro “La Política” forjó la frase “El hombre es un animal político” (“zoon politikón” que ahora sería “zoom virtual connection”), aunque en honor a la verdad yo me siento más bien un Animal Porcino. Soy consciente de que tengo menos pares de cromosomas que los cerdos domésticos, 23 frente a sus 38, e incluso menos que el jabalí, que tiene 36, pero estudiando la evolución, sabemos que todos descendemos de nuestros ancestros africanos humanos, lo que me tranquiliza. Como bien saben, este mismo año se han descubierto en Huelva (próximos a Doñana y Matalascañas) lo que se consideran las huellas del antecesor del cerdo ibérico, un jabalí de unos 300 kilos (Suidichnus galani) que se refugió del hielo con los últimos neandertales (hace 106.000 años Europa estaba sepultada bajo la nieve y los glaciares), cuyo trabajo está publicado en Quaternary Science Reviews. Los orígenes evolutivos del Sus datan del este asiático hace 4.2 millones de años, expandiéndose por todo el continente asiático, medio Oriente y África, llegando posteriormente a Europa hace al menos 1 millón de años, siendo conocido como Sus scrofa con sus respectivas subespecies, incluida la variedad doméstica que tenemos en nuestras granjas, el Sus scrofa domesticus, cuyo origen data de hace algo más de 9.000 años.

 

También desde África en 1960 nos llegó a España la Peste Porcina Africana (PPA), originada por un virus icosaédrico ADN con envoltura de 200 nanómetros de la Familia Arfarviridae. El virus se identificó en Kenia hace ahora justo 100 años (1921) de los que 35 permaneció en nuestro país, donde fuimos declarados libres en diciembre de 1995. En 2007 nuevamente desde África llega a regiones europeas del Caucaso, distribuyéndose por gran parte de centro este de Europa y Rusia durante diez años. La PPA se reportó en China por primera vez el 3 de agosto de 2018 en cerdos domésticos, extendiéndose por todo el país en tan solo nueve meses y originando enormes PPM (Pérdidas Porcino Millonarias), y cuyos efectos colean a nivel de toda la industria porcina mundial dos años y medio después. No olvidemos que China también es endémica a la Peste Porcina Clásica (PPC), con lo que completamos el título de la columna, enfermedad vírica que también nos resulta familiar en nuestro país desde 1952, y que gracias a un Programa Nacional efectivo que incluía la vacunación de madres y lechones, pudimos erradicar en 1986 (nos duró 34 años, 1 menos que la PPA). Esta enfermedad está causada por un virus ARN de la familia Flaviviridae, que contrariamente a la PPA si fue endémica en Estados Unidos, de donde se tienen los primeros informes en 1830, apareciendo posteriormente en Inglaterra en 1860. El pasado 3 de febrero la asociación americana de veterinarios de porcino publicó un informe donde exponen su plan de detección temprana de animales infectados, así como el protocolo de actuación frente a la PPA, haciendo incluso una estimación económica en el supuesto de que el virus llegase por primera vez. En el mismo reflejan que el precio del cerdo caería un 47% el primer año, se reduciría un 30% el censo en diez años con una pérdida de unos 140.000 empleos y unas pérdidas durante esos diez años de unos 50.000 millones de dólares. Concluyen que “debemos estar seguros de cerrar todas las ventanas por donde el virus podría entrar en el país, siendo rigurosos en las medidas de bioseguridad”. Creo que a estas alturas, a nadie le cabe ninguna duda que cualquiera de estos problemas sanitarios serían una catástrofe para nuestro sector, por lo que quiero referirme al texto del Tacuinum Sanitatis escrito en el siglo XV por el médico Ibn Butlan durante una pandemia de peste en Oriente Medio que hacía referencia a la importancia de recuperar y conservar la salud, prestando mucha importancia al aire que respiramos, para concluir pidiendo un deseo como celebración del Centenario de la Peste Porcina Africana para este año 2021: “Que conservemos la salud que tenemos en nuestros cerdos libres de PPA y PPC, además de que nos recuperemos los humanos de la pandemia de Coronavirus”.

 

“Si tu plan es para un año, planta arroz. Si tu plan es para diez años, planta árboles. Si tu plan es para cien años, educa a los niños” – Confucio (siglo V a.C.) Pensador chino

Por Antonio Palomo Yagüe – ADM SETNA