La problemática del raboteo en el ganado porcino (II Parte)

Continúa aquí la segunda parte de este trabajo referido a la problemática del raboteo en el ganado porcino, cuya primera entrega se publicó en el boletín número 108 de fecha 3 de julio del presente año 2018.

Según una serie de estudios consultados, el corte de la parte distal de la cola hace que la zona que se deja sea más sensible y, por esta razón, el animal reacciona antes cuando le muerden y se aparta, mientras que si la cola está entera, podrían morderle su extremo y el animal no notarlo hasta que el daño fuera más grave.

También hay estudios que dicen que el efecto de corte de parte de la cola deja al animal con la sensación de que todavía “siente” pues tras amputar un miembro se forman “neuromas” y hay una sensación de dolor crónico, a diferencia del corte de colmillos o la castración, que es un dolor agudo.

Según la EFSA si no se cortan las colas, sí hay mordeduras de colas pero, en general, no son tantas como para justificar que se haga en todos los cerdos ¿Qué elegimos entonces, cortar el rabo a todos (y todos con dolor) y que solo alguno sea mordido, o no cortar (y ninguno con dolor) y que alguno más sea mordido?

Es curioso que este problema de la caudofagia no se dé en jabalí y muy poco en el cerdo sujeto a modelos de explotación extensivos. Por tanto, se podría vincular el tema de la caudofagia al hecho de no dejarles hozar y aunque se ha evolucionado genéticamente en otros parámetros, no se les ha inhibido el instinto de buscar comida, aunque se la facilitemos. Esto explicaría que en el cerdo sujeto a modelos intensivos de producción, con abundante paja, también se den casos de mordeduras de cola.

La otra situación que no acaba de resolverse es la del Material Manipulable, pues Europa aún no tiene claro qué vale y qué no. Sí que hay catalogados una serie de materiales como elementos óptimos, subóptimos y prohibidos, pero las experiencias prácticas ponen de relieve que, con el tiempo, algunos materiales dejan de poderse utilizar si no se enriquecen, como es el caso de las cadenas. Por esta razón el interés real en la utilización de estos materiales solo es a corto plazo, si no se van renovando.

Al día de hoy disponemos de la Recomendación (EU) 2016/336 de la Comisión de 8 de marzo de 2016 respecto de la aplicación de la Directiva 2008/120/CE del Consejo relativa a las normas mínimas para la protección de cerdos en lo que se refiere a medidas para disminuir la necesidad de practicar el raboteo (se adjunta al final de este trabajo).

Pero, hemos de estar atentos a lo que se nos vaya pidiendo desde la Administración. Parece que el sector porcino no ve la posibilidad de cambiar la situación actual sin que ello afecte negativamente a la rentabilidad. No obstante, todo parece indicar que se le va a demandar que actúe en el sentido de no rabotear.

Para concluir; quiero dar las gracias a Enma Fábrega del IRTA por su magnífica información.

Fernando Laguna Arán
Veterinario e Ingeniero Técnico Agrícola
ADS porcino Hoya de Huesca y ADS porcino Santa Orosia de Jaca.