El sector del cerdo del Alentejo, en Portugal

El cerdo alentejano, explotado en un sistema extensivo, de pasto, tiene una gran importancia para las explotaciones de secano de la zona del Alentejo, en áreas de tierras pobres, donde se ubican el alcornoque y la encina.

Es, probablemente, uno de los pocos sectores donde hay cierta seguridad de estabilidad y flujo de precio, lo que no sucede en otros sectores de actividad pecuaria, como es, por ejemplo, el caso del ganado ovino.

En el caso del cerdo alentejano, se puede predecir con una cierta antelación y bastante seguridad, cómo va a evolucionar el precio al productor, porque hay contratos firmados entre éste y las industrias de transformación. Un cerdo de pasto puede alcanzar hoy fácilmente valores superiores a los 500 € por animal.

Debido a la grave crisis que se produjo entre los años 2008 y 2012, el número de cerdos alentejanos cebados a base de pasto disminuyó en casi un tercio. De los 50.000 animales que había en el año 2008, pasó a solamente 28.000 en el año 2012. Hoy en día, habrá alrededor de 35.000 animales. La tendencia es aumentar la producción porque, además de la demanda de cerdo de Alentejo por parte de las industrias portuguesas y españolas de producción de jamón, hay también mucha superficie de montanera que no se utiliza para la producción de cerdo alentejano (se estima que sólo el 20 por 100 de la superficie disponible de montanera en la zona se utiliza para la producción de esta raza).

En este momento, el libro genealógico del cerdo alentejano tiene inscritos únicamente 9.000 reproductores.

La materia prima tiene una alta calidad, pero, en Portugal, la capacidad de procesamiento de la carne es reducida (del orden de 7.000 a 10.000 cerdos por año). Se necesita capital para invertir en la industria y poder valorizar adecuadamente a nuestra “joya”-el cerdo alentejano – crear más riqueza en los pueblos y en las aldeas del Alentejo y reducir la actual dependencia de los compradores españoles, que absorben el 90 por 100 de la producción nacional de la producción del cerdo alentejano en extensivo.

Carne de porco a la alentejana.

La montanera es crucial para esta producción, pero las actuales amenazas existentes para este ecosistema son diversas. Tenemos, en algunas áreas, un alto contenido de alcornoques y de encinas con una elevada mortalidad, debido a la sequía, a la fitóftora (hongo del suelo que destruye las raíces secundarias y asfixia al árbol) y al cambio climático. También la erosión en las zonas de montanera constituye una amenaza para este tipo de producción, que genera 40 millones de euros a la economía portuguesa.

Esta raza tiene como características principales la rusticidad y su gran capacidad de infiltración de grasa intramuscular, lo que hace que sea este tipo de animal el que mejor rentabilice este ecosistema natural, compuesto por la zona de montanera y por su producto, la bellota.

El cebo del cerdo Alentejano en este medio proporciona a los animales una grasa intramuscular saludable, rica en ácidos grasos monoinsaturados, que proporciona a su carne los inconfundibles aroma y sabor, dando lugar a una serie de productos tradicionales protegidos por la correspondiente Denominación de Origen Protegida (DOP) y la IGP (Indicación Geográfica Protegida). También hay una DOP para la carne fresca del cerdo alentejano y varias IGP para sus embutidos.

Entre los productos más famosos están el jamón, la Paleta de Barrancos DOP y el Jamón o Paleta de Santana da Serra IGP; su fama ha trascendido largamente las fronteras portuguesas.

Recientemente, se aprobó un Decreto que regula el uso comercial del nombre «cerdo negro», que hasta la fecha se utilizaba indiscriminadamente y sin control alguno. Esta legislación representa un nuevo estímulo para los productores del cerdo alentejano.

Para usar ese nombre, ahora es preciso partir de reproductoras inscritas en el libro genealógico. Se permite que sean cruzados con machos Duroc inscritos también en su libro genealógico. Estos cruces proporcionan animales con un mejor rendimiento a la canal, lo que da lugar a mayores producciones de los mencionados productos.

Al tener que respetar los ganaderos el mencionado Decreto, se garantiza que las producciones siempre tendrán, como mínimo, un 50 por 100 procedente de la genética de la raza alentejana.

 

Philippa David Duarte.
Asociación de criadores de Cerdo Alentejano de ACPA.