El Gobierno de Cantabria ha aprobado este viernes, en su reunión semanal, el decreto que regula la concesión directa de ayudas, por importe de 1,4 millones ampliables, destinadas a paliar los daños generados por la enfermedad hemorrágica epizoótica y también ha dado luz verde a subvenciones de 4 millones para inversiones productivas en explotaciones agrarias.

Las ayudas por la enfermedad hemorrágica están destinadas a compensar las pérdidas por muerte y aminorar los gastos por tratamiento de los animales enfermos y para contemplar las posibles secuelas de los últimos focos notificados desde el 17 de noviembre de 2023 hasta el 31 de diciembre de 2023. Estas se unen a las concedidas anteriormente.

Además, se incluyen los animales, muertos por la enfermedad inaccesibles (aquellos cuya identidad ha sido comprobada por el veterinario que ha certificado su fallecimiento por EHE pero que el servicio de recogida no ha podido retirar por encontrarse en lugares de terrenos abruptos) desde el 5 de septiembre hasta el 31 de diciembre para compensar la pérdida.

En el caso del ganado bovino de hasta 18 meses se concederán 750 euros tanto en el caso de la aptitud cárnica como de leche; de más de 18 meses, la cuantía será de 1.000 para las de carne y de 1.500 para las de leche.

En el caso de las muertes de ovino y caprino, se subvencionarán con 70 euros para los animales de hasta 12 meses y con 120 euros para los de más de 12 meses.

Para hacer frente a los gastos de desinsectación y tratamiento, se podrá efectuar un pago de 25 euros por animal afectado.

En cuanto a las ayudas para inversiones productivas en explotaciones agrarias de casi 4 millones, cofinanciados entre la comunidad autónoma con apoyo del FEADER, la convocatoria comprende dos líneas de ayudas.

Una de ellas es la dirigida a la mejora ambiental en estas explotaciones agrarias, que financia inversiones vinculadas a contribuir a la mitigación adaptación al cambio climático, uso eficiente de los recursos naturales, a la mejora de la eficiencia energética y producción de energías verdes en las explotaciones agrarias, y la otra es la de modernización o mejora de las instalaciones.