Avances en la propuesta de la Comisión Europea para reducir la presencia de ácidos grasos trans en los alimentos
En el contexto de un Comité Permanente, los Estados miembros respaldaron hace unos días la propuesta de la Comisión de establecer un límite máximo para el uso de grasas trans en los alimentos producidos industrialmente en la Unión Europea (EU).
El objetivo prioritario de la mencionada medida es el de proteger la salud de los consumidores y promover opciones de alimentos más saludables para los europeos.
A lo largo de los años, varios estudios científicos, incluido uno reciente de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, han enfatizado que las ingestas dietéticas de ácidos grasos trans deben ser lo más bajas posibles para evitar riesgos para la salud.
En concreto, el límite máximo establecido hoy corresponde a dos gramos de grasas trans por cada 100 gramos de grasa en los alimentos destinados al consumidor final. El Parlamento Europeo tiene ahora dos meses para examinar el borrador del Reglamento.