Opinión de Antonio Palomo: “HAM  BURGUESA”

Opinión de Antonio Palomo: “HAM  BURGUESA”, FOTO Antonio PalomoOpinión de Antonio Palomo: “HAM  BURGUESA”

La semana 27, ósea la anterior a esta, tuvo grandes alicientes, donde uno se reafirma en la calidad de un gran número de seres humanos, que no de otros. Todas nuestras acciones en la vida generan consecuencias, debiendo ser conscientes de que malas acciones suelen producir resultados negativos, aunque, en algunas ocasiones no pase nada malo, y eso nos haga saltarnos la lógica. A la inversa también sucede, siendo menos justo. He aquí el refrán que advierte “quien siembra vientos, cosecha tempestades”, aunque personalmente practico más el dicho “quien siembra no le teme a la cosecha”, que lleva implícito hacer las cosas por convicción, aportando y ayudando a los demás, sin esperar nada a cambio. No está de menos mencionar el que refiere, “de aquellos polvos, estos fangos”, aunque este me crea alguna confusión que otra. Un colega, en una interesante conversación, laborando, me preguntaba cómo es posible, que una granja de la noche a la mañana se torciera. A lo que le respondía que, en mi opinión, los problemas no son súbitos, sino son debidos a un conjunto de concausas, factores multifactoriales sumatorios en el tiempo como riesgos que vamos asumiendo sin que pase nada, de momento, hasta que sobrepasamos el umbral bien de la presión de infección, bien de la robustez, bien de la resiliencia de los propios animales, desembocando en signos agudos. Suelo utilizar la frase de que “nada es por casualidad” y aquella otra del anuncio del bolígrafo BIC creado en 1950: “a veces, sólo es cuestión de hacer lo básico, bien hecho”. Pongo un ejemplo mencionado en el Agrifood Congress, donde nos preguntaban si los productos veganos son una moda o una tendencia, que también puede ser una tendencia de moda, que no de media ni mediana. Ante esto siempre me surge la siguiente duda: ¿por qué esto se da más en los progres que en los pobres o en los países con mayor poder adquisitivo que en los países subdesarrollados? Claro que esto se contradice con que la burguesía consume más jamón, que viene de “ham burguesía” frente a la hamburguesa que la comemos casi todo el mundo por su módico precio, y en ocasiones por capricho. Bueno, si es vegana, ya no es tan barata, además de que su sabor, aún está en las postrimerías de las de carne. No siendo de la burguesía, y sí del noble sector primario, personalmente considero que la calidad nutricional y sensorial del “jam on” está por encima de esos productos en off, con todos mis respetos a quienes los fabrican y consuman. A ver si es que dichos productos corresponden a una demanda inelástica, concepto económico introducido por el economista británico Alfred Marshall, que pretende cuantificar la variación experimentada por una variable para cambiar a otra, o bien al adagio “menos vergüenza que un gato en una matanza”

            Precisamente, en los destacados contactos que mantuve la semana pasada, que abarcaron desde el clero, al ejecutivo y el ejército, la vergüenza es un hecho diferencial, ya que el jamón es un común denominador del gusto de los tres estamentos.  Incluso, nuestro ministro de consumo bien lo puso como plato para abrir boca en su propia boda. ¿Incoherencia o paradoja? En sentido corriente y moliente, una paradoja es una afirmación que parece auto -contradictoria o contraria al sentido común, pero que tal vez sea verdadera. Si profundizamos, y nos vamos a la definición del filósofo lógico británico Mark Sainsbury (1943), define paradoja como una conclusión aparentemente inaceptable derivada de un razonamiento aparentemente aceptable basado en premisas aparentemente aceptables. Como ven hoy menciono a varios ingleses, por lo que no me quiero dejar al premier Boris Johnson que dimitió el día de San Fermín, sin duda un día excelente para celebrar los encierros, copiando y pegando sus propias palabras: “Amigos míos, en política nadie es imprescindible”. Pues a ver si es verdad, y otros toman nota. Claro que, en nuestro país, el ejecutivo (poderes políticos), más bien, se mimetizan con la primera ley de la termodinámica en la que la energía ni se crea ni se destruye, tan solo se transforma, eso sí, dentro de un sistema aislado. Ya lo decía el filósofo griego Heráclito de Éfeso (540-480 a.C.): “las cosas encuentran reposo en el cambio”, conocido como un gran misántropo, tras apartarse de la sociedad y alimentarse de hierbas y plantas desarrolló hidropesía, muriendo joven. Igual, si llega a comer jamón, sus destinos hubieran sido más placenteros y longevos. El libro que escribió era bastante complejo, hasta el punto de que, al leerlo Sócrates, dijo aquello que a mi también me pasa algunas veces: “lo que comprendo es espléndido, como – seguro – lo que no comprendo”.

            Con estos prolegómenos, les resultará fácil entender como de mis tres encuentros de la semana pasada, me quede con el clero y el ejército, a cuyos dos miembros, Florentino y Alejandro, quiero dedicar esta columna con especial cariño, gratitud y respeto. Por cierto, también les gusta el jamón, y cuanto más bueno, más les gusta, lo cual no me parece nada paradójico. Ambos, se encuadran en lo que escribía Albert Camus, diciendo que la auténtica generosidad hacia el futuro consiste en darlo todo en el presente. Mi yerno, en acto de servicio en Valladolid perdió a su compañero Pedro Alonso Casado de la Unidad Especial de Intervención (UEI – Celeritas et subtilitas patrio) al tratar de salvar otra vida, a quien desde estas líneas quiero ensalzar y honrar. Y el párroco segoviano Don Florentino, a quien conocí gracias a una pareja de estupendos Veterinarios, haciendo el bien a sus feligreses, muchos de ellos personas mayores del medio rural, que algunos llaman la España vaciada, pero que realmente es la más llena de humanidad. Engloba lo que la bióloga francesa Emmanuelle Pouydebat refleja en su obra científica, donde habla constantemente de la humildad y la sobriedad, tendiendo a optimizar más que a maximizar. Quiero reflexionar sobre la importancia de las pequeñas cosas bien hechas, como también puse en un informe posterior a la visita a una granja la semana pasada con el gráfico del bolígrafo BIC, ya que vivimos en una sociedad donde pensamos que lo grandilocuente es lo mejor. Estamos trabajando contra las resistencias antimicrobianas derivadas de muchos años de uso indiscriminado de antibióticos (aquellos vientos), cuando tenemos la hormiga africana (Tetraponera penzigi) que coloniza las acacias espinosas de los bosques de Kenia, produce el hongo Streptomyces formicae, del que se alimenta, el cual contiene una cepa eficaz contra las bacterias más resistentes conocidas (Staphylococcus aureus resistente al penicilínico meticilina y Enterococcus resistente al glucopéptido vancomicina). Estúdiese.

Sin saberlo, puedes estar viviendo los mejores años de tu vida. Disfruta y agradece siempre” El Principito

 

Date de alta y recibe nuestro 👉🏼 Diario Digital AXÓN INFORMAVET ONE HEALTH

Date de alta y recibe nuestro 👉🏼 Boletín Digital de Foro Agro Ganadero

Noticias animales de compañía

Noticias animales de producción

Trabajos técnicos animales de producción

Trabajos técnicos animales de compañía