¿Qué es PREVPA? Es el grupo preoperativo de prevención frente a la Peste Porcina Africana en España financiado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, cofinanciado en un 80% por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural, dentro del marco del programa Nacional de desarrollo Rural. El pasado 15 de noviembre se presentó en Madrid este grupo operativo supra-autonómico que nace con la ambición de transferir herramientas innovadoras para la preparación del sector porcino y el subsector cinegético de España frente a la Peste Porcina Africana (PPA) a nivel nacional. El grupo cuenta con entidades de ámbito nacional representantes del sector ganadero (Asici e Interporc) y del sector cinegético (IREC) entre otras, constituyendo un equipo homogéneo y equilibrado que transferirá las medidas adecuadas a ambos sectores para lograr prevenir la entrada de la PPA en las explotaciones ganaderas y áreas naturales de España. El equipo científico participante es experto en materia de sanidad porcina, gestión poblacional y sanitaria del jabalí, así como en PPA. Los objetivos específicos son: contribuir a una eficaz estrategia de gestión de las poblaciones de jabalíes, preparar el sector porcino para reducir el riesgo asociado al jabalí en las granjas y mejorar la capacidad de compartir datos y conocimientos entre los sectores implicados en la preparación de la respuesta frente a la PPA. Para ello llevarán a cabo la caracterización de la dinámica poblacional del jabalí en España como base para regionalizar (zonificar) su sobreabundancia y el riesgo sanitario que supone. Sirva recordar que de las bajas anuales de jabalíes en España la mitad son por la caza, 30% por tuberculosis y 20% por otras causas según el IREC (Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos – Ciudad Real). No me cabe ninguna duda, después de visitar hace unos días dicho centro, que dispone de los medios técnicos y humanos más avanzados en nuestro país para llevar a cabo los estudios que cuantifiquen el tamaño de las poblaciones de jabalíes de una manera fiable, así como su distribución con una resolución espacial que permita establecer estos números a una escala de utilidad para la gestión del jabalí, que son esenciales para la gestión de sus riesgos asociados, y que especialmente nos preocupan al sector porcino en referencia a mantenernos libres de la Peste Porcina Africana. Los jabalíes han evolucionado desarrollando una gran flexibilidad ecológica, lo que aumenta su riesgo como transmisores, al tiempo que, sabemos son el ancestro salvaje de nuestro cerdo doméstico, actuando como especie invasora que modifica el ecosistema y nos puede hacer tambalear la sanidad de nuestros cerdos con todos los graves riesgos económicos que ello supone.

El primero que utilizó el término invasión biológica fue el zoólogo inglés Charles Elton durante 1958 en su publicación The Ecology of Invasions by Animals and Plants. Según un estudio de Biological Reviews de 2020 estamos hablando de que hay unas 18.000 especies invasoras en todo el planeta, debiendo saber diferenciar entre exótica e introducida, que no siempre son invasoras. Solo las que tienen la posibilidad de originar alteraciones ecológicas, económicas y sanitarias podemos considerarlas invasivas. Así el biólogo Mark Williamson de la Universidad de Nueva York enuncia la regla estadística de los tres 10: 1 de cada 10 especies importadas aparecerá en la naturaleza, 1 de cada 10 especies introducidas logrará establecerse en el nuevo medio, y solo 1 de cada 10 de las establecidas se convertirá en una plaga o invasora. Esperemos que no sea el caso del jabalí.

Bien conocemos la relevancia que tuvo y está teniendo en Europa el jabalí en la diseminación del virus de la Peste Porcina Africana, por lo que sabiendo que no es fácil que los jabalíes por su propio pie pasen los Pirineos, lógicamente antes deberían pasar por Francia, no es desdeñable considerar nuestra cabaña de este mamífero artiodáctilo en la península ibérica (España y Portugal), así como la interacción entre jabalíes y cerdos en extensivo, especialmente los ibéricos. Un animal con hábitos sobre todo nocturnos, que emite dos tipos de sonidos (gruñidos y silbidos) más su ronquido cuando barrunta gente (rebudiar), no es de fiar. Lo bueno es que son muy sociables y matriarcales, además de dormir unas 12 horas durante la fase diurna y correr a 40 km/hora, por lo cual, a muchos, bien nos gustaría ser jabalíes. En estos momentos (mes de noviembre y principios de diciembre) es la principal época en la que salen a celo las jabalinas, de forma que entre marzo y abril nacen los rayones o jabatos (que también significa valiente y luchador). A nivel reproductivo hay diferencias significativas con respecto a la cerda ibérica, ya que alcanzan la pubertad casi a los dos años frente a los 6-7 meses, y su gestación es de 118-120 días frente a los 113 días en ibéricas puras. La península ibérica junto a los cerdos ibéricos son un binomio único en el mundo, y por lo tanto nuestra seña también de identidad dentro del porcino a nivel mundial, qué sin duda, y desde mi humilde punto de vista, nos ha ayudado a lo largo de las últimas décadas a potenciar la imagen de nuestro sector porcino y posicionamiento. Claro que, no es lo mismo ibérico que íbero, aunque su escritura sea la ibérica y bien estén representados por la Dama de Elche – Alicante y la Dama de Baza – Granada (mujeres iberas de elevado estatus social) que hoy podemos ver en el Museo Arqueológico Nacional de España en Madrid. Los antiguos griegos se referían a los iberos como las personas de los pueblos de levante y sur de la península ibérica, que corresponden hoy a Andorra, Francia, España y Portugal, y cuya principal actividad fue la agricultura y la ganadería, seguida de la minería y la metalurgia. Las características raciales de los íberos eran de aspecto físico bajo y morenos, con un carácter individualista y guerrero, aunque algo más civilizado que los celtas. Ya saben lo que decía nuestro entrañable actor Paco Martínez Soria del español medio, que era “bajito, moreno y cabreado”. Lo de bajito y moreno bien coindice con nuestros cerdos ibéricos, y lo de cabreado con algunos humanos. Los iberos rendían culto al toro, y los españoles actuales, creo mejor, debemos rendir culto al cerdo.

Quiero aprovechar esta columna de opinión para felicitar, muy sinceramente, a todos los participantes, nominados – no nominados y en especial a los premiados el pasado viernes 19 de noviembre en Sevilla, la perla del Guadalquivir o la hermana de Roma, la otra ciudad eterna, dentro de la gala de los Premios Porc d´Or ibérico en su quinta edición. FELICIDADES.

año 2019) y cofinanciado con un 80% por el Fondo

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