Más de 4.600 productores de vacuno se beneficiaron de 7 millones en ayudas por restricciones a causa de la covid

El Diario Oficial de Galicia (DOG) publica este miércoles la resolución de la Consellería do Medio Rural por la que se dan a conocer los beneficiarios de las ayudas temporales y excepcionales a los sectores agrarios más desfavorecidos por la incidencia de la crisis de la covid-19. Así, un total de 4.621 productores de ganado vacuno recibieron cerca de siete millones de euros para sufragar parte de las pérdidas ocasionadas por la emergencia sanitaria.

Según ha recordado la Xunta, esta línea de aportaciones fue «temporal y excepcional». Así, las especiales circunstancias que se produjeron como consecuencia de la covid-19 provocaron amplias restricciones de movimientos de los productos agroalimentarios, así como el cierre obligatorio de establecimientos comerciales, mercados, restaurantes, otros establecimientos hoteleros, actividades culturales y actividades recreativas, ocasionando una interrupción económica para determinadas actividades del sector primario que, como consecuencia, causó problemas de liquidez y flujo de caja para los productores.

De ahí que la Consellería do Medio Rural sacase una orden de ayudas directas, cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader). La selección de los sectores más afectados -vacuno de carne y el sector de la planta ornamental y flor cortada, que también recibieron ayudas- se hizo de manera consensuada con los integrantes del Consello Agrario. Para seleccionarlos se tuvieron en cuenta criterios objetivos sobre pérdidas constatables que pudieran suponer un riesgo para su continuidad empresarial.

En el caso de las ayudas directas de vacuno de carne, los beneficiarios de estas subvenciones fueron los titulares de explotaciones agrarias con orientación productiva cárnica de vacuno, inscritas en el REAGA con clasificación zootécnica de reproducción para producción de carne o mixta, y que tuviesen al menos 10 vacas nutrices, calculadas a fecha 14/03/2020.

 

PRODUCTOS VITIVINÍCOLAS

Por otra parte, el DOG publica también este miércoles la resolución de la Consellería do Medio Rural por la que se dan a conocer los beneficiarios de las ayudas para la elaboración y comercialización de productos vitivinícolas del año 2020. Así, un total de 31 bodegas se beneficiaron de una subvención total que asciende a 2,3 millones de euros.

Mediante esta línea de aportaciones, se subvencionaron los costes de construcción, adquisición o mejora de bienes inmuebles, así como de compra de nueva maquinaria y equipos hasta el valor de mercado del producto. Los principales objetivos de esta convocatoria son, entre otros, los de fomentar la agrupación de los primeros eslabones de la cadena alimentaria mediante la integración de las entidades asociativas y el asociacionismo agrario e impulsar los procesos sostenibles desde el punto de vista ambiental a través del ahorro de energía, la eficiencia energética global, la utilización de energías renovables y la valorización y tratamiento de los residuos.

De este modo se pretende fomentar la certificación ambiental de las instalaciones de las empresas vitivinícolas, la producción ecológica y los productos acogidos a regímenes de calidad y los pagos de uva por calidad. Otras finalidades pasan por favorecer la innovación y la implantación de nuevos productos y nuevas presentaciones, por el incremento de la dimensión empresarial, por la participación de los viticultores y elaboradores en la cadena de valor o por impulsar las inversiones en comercialización.

Paralelamente, Medio Rural ha publicado también en el DOG los beneficiarios y las ayudas concedidas en 2020 al amparo de tres convocatorias destinadas a fomentar la calidad alimentaria entre los consejos reguladores y las asociaciones de productores. En total, se otorgaron algo más de cuatro millones de euros a una treintena de entidades y muchas de ellas recibieron aportaciones de más de una línea de subvenciones.

 

QUEIXO DO CEBREIRO

Finalmente, la Xunta publica este miércoles una orden en la que se acepta la solicitud formulada por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Queixo do Cebreiro para hacer determinados ajustes en su pliego de condiciones técnicas.

Las modificaciones propuestas afectan principalmente a la descripción de las características del producto y al método de obtención y están relacionadas, en gran medida, con la eliminación del límite máximo de peso de los quesos, que actualmente es de 2 kilos.

Además, mientras que hace unos años la producción de quesos curados era casi anecdótica y la inmensa mayoría de la producción se comercializaba como queso fresco, actualmente es cada vez mayor la proporción de producto que se vende curado, por lo que se hace necesaria una caracterización más precisa de este tipo de quesos.

Por otra parte, en lo relativo a la autoridad de control, es preciso modificar la referencia al Instituto Galego da Calidade Alimentaria (Ingacal) para sustituirla por la Axencia Galega da Calidade Alimentaria (Agacal).