El matadero de Andújar reanuda el sacrificio de animales tras adoptar las garantías exigidas desde Salud

El matadero de Andújar (Jaén) ha reanudado este miércoles el sacrificio de los más de 1.000 reses de ovino y caprino que tenía en sus instalaciones tras acreditar su procedencia y adoptar las garantías sanitarias que se les habían exigido desde la Consejería de Salud y Familias como administración responsable a la hora de «velar por la seguridad alimentaria y el cumplimiento de la normativa vigente, incluida la de bienestar animal en mataderos».

Desde la Consejería se había requerido a la empresa para que aportara las medidas concretas necesarias para poder reanudar la actividad con las garantías necesarias de bienestar animal, higiene e inspección, las cuales serán específicamente verificadas durante 15 días antes de levantar definitivamente la medida de cese, sin menoscabo de la vigilancia permanente de los veterinarios oficiales.

Ello implica que durante las próxima dos semanas, Salud verificará que se han cumplido todas las exigencias para así levantar definitivamente el cese temporal de la actividad, según se ha indicado desde la Consejería a Europa Press.

Salud y Familias abrió un expediente y cesó temporalmente la actividad a este matadero por «el incumplimiento de medidas relativas al bienestar animal de los animales durante su sacrificio» a pesar de «las advertencias realizadas por los veterinarios oficiales, así como incumplimientos relacionados con la propia inspección e higiene».

Según Salud, desde el momento que se produjo el cese de la actividad de sacrificio, los veterinarios oficiales se han desplazado a las instalaciones para «verificar que se mantienen en estado adecuado a los animales existentes en los corrales de la empresa, procurándoles comida, agua y un mantenimiento adecuado».

Podemos Jaén pidió este lunes a la Junta de Andalucía que diera una «solución inmediata» a las más de 1.100 reses hacinadas en el matadero de Andújar cuya actividad, según indicó esta formación, fue suspendida el pasado 27 de mayo al detectar incumplimientos en las medidas relativas al bienestar animal.

En el matadero quedaron más de 1.100 ejemplares de ovino y caprino, que se han mantenido en el interior de las instalaciones, algunos ya muertos, según Podemos, como consecuencia de la escasez de comida y agua.