SENSIBILIDAD vs ESPECIFICIDAD

¿Falso positivo o falso negativo?  En esta columna de opinión mi único objetivo es dejar claro con lenguaje coloquial a aquellas personas no versadas en las técnicas diagnósticas, cuál es cuál de cada uno de estos dos conceptos en un momento donde escucho hablar con bastante frivolidad de los mismos al interpretar los test frente al virus que hoy nos resulta a todos tan familiar, por desgracia. En cualquier caso, ambos significan falso, que es contrario a la verdad. De aquí que sea tan importante tener los menos falsos posibles, tanto positivos como negativos. Así la sensibilidad es la capacidad de una prueba para detectar la enfermedad en animales/personas enfermas, es decir positivas, mientras que la especificidad nos indica aquellos casos negativos de los que realmente son sanos, es decir negativos. De esta manera, un falso negativo es aquel animal enfermo diagnosticado como sano, y un falso positivo es un animal que ha dado positivo estando sano. Por lo tanto, lo que más nos interesa es que una prueba tenga una alta sensibilidad, de tal manera que identifiquemos correctamente a un animal enfermo mediante una prueba diagnóstica positiva, al mismo tiempo que una alta especificidad, que equivale a que si la prueba es negativa el animal realmente esté sano. Personalmente me preocupan por igual tanto los falsos positivos como los negativos, aunque podemos pensar que con un falso negativo, es decir, que está enfermo realmente (sintomático o asintomático), corremos más riesgos sanitarios. Como decía Gandhi: “el insecto que camina sobre la arena ignora lo que ocurre en la cabeza del elefante”.

La sensibilidad también es una facultad que tenemos los seres vivos para sentir emociones. Pero también lo usamos cuando queremos expresar algo concreto y que se manifiesta de forma contundente, real y positiva. Quizás con esto pueda ayudar a los menos familiarizados con las técnicas diagnósticas a correlacionar la sensibilidad con lo positivo. En el lenguaje coloquial, la utilizamos para describir aquellas personas que son más proclives a ser heridas en sus emociones y que, si además lo ligamos al séptimo nivel dentro de la escala musical, llegamos a esos grados en los que la música nos sublima. No se ustedes, pero yo prefiero a personas sensibles, es decir con alta sensibilidad, es decir que seguro van a ser positivo.

La especificidad es el porcentaje de verdaderos negativos. No estaría de más en nuestra práctica diaria detectar cuanto antes a esas reproductoras o cerdos de engorde cuya productividad está siendo deficiente e inferior a los objetivos de producción para sacarlas del sistema precozmente reduciendo su impacto negativo sobre el resto. Cuántas veces escuchamos lo de que siempre pagan justos por pecadores. Necesitamos técnicas muy específicas para su detección. Quizás se parezca un poco al proceso del headhunting de selección de personal, en el que el headhunter (cazatalentos) está buscando al verdadero positivo y al verdadero negativo, para quedarse con el verdadero positivo que se ajuste a su perfil y nunca al falso positivo ni al falso negativo.

En nuestras técnicas diagnósticas para la detección de anticuerpos (IgA, IgG, IgM) y antígenos (PCR actuales), con las que llevamos trabajando en porcino desde hace muchos años, gozan de sensibilidades y especificidades muy elevadas, que rondan el 95%. Esto significa que, de cada 100 individuos analizados, podemos tener 5 que sean bien falsos positivos o falsos negativos, lo que en ciencia ya es todo un logro y modestamente considero que roza los gold standard. Claro que si lo comparamos con que para gobernar un país con la mitad más uno (51%), eso ya se da por válido, entonces los actuales test de diagnóstico para coronavirus con un 60-80% de sensibilidad superan todas las expectativas de los mismos. Por ello me pregunto si ¿no deberíamos tener un mayor grado de consenso para temas tan importantes? Pero esto no es todo, y podríamos añadir un gran número de factores de variación que como bien saben todos tenemos en cuenta cuando realizamos cualquier prueba en nuestras propias granjas, como son que el PCR puede detectar partículas del virus sin que esté el virus completo, que tenemos nuevas técnicas diagnósticas más precisas como la secuenciación genómica, que la respuesta de anticuerpos varía por individuo y en el tiempo, que la dosis infectiva es crítica, que pueden aparecer nuevas cepas de virus muy frecuente en virus ARN que pueden ser incluso más patógenas, que haciendo pool de muestras podríamos analizar a mucha más población, que la duración de la inmunidad también es variable, que hay vacunas que no titulan anticuerpos, que solo las vacunas marcadas nos permiten diferenciar anticuerpos vacunales de virus campo……

Quiero terminar poniendo un ejemplo puramente académico y dedicando esta columna de opinión a todos los profesores que desde la guardería de nuestros hijos hasta los másteres que cursamos, tienen la misión de enseñar y educar (a estos también llamados maestros). Con ello espero que queden claros estos dos conceptos motivo de este artículo. Cuando nos poden un examen con preguntas a las que debemos responder exclusivamente verdadero o falso, si acertamos el 100% significa que no hemos contestado a ninguna que era verdadera como falsa ni a ninguna que era falsa como verdadero, con lo cual nuestra nota será de 10 y habremos tenido el máximo de sensibilidad y especificidad. Eso es lo que les deseo a todos, al tiempo que me permito recomendarles la película Sense and Sensibility de Emma Thompson y Hugh Grant con siete nominaciones a los Óscar en 1995.

 

“Cuando nuestras ideas chocan con la realidad, lo que tiene que ser revisado son las ideas” – Jorge Luis Borges Acevedo (1899-1986) Escritor argentino