• España cuenta con razas caprinas autóctonas con un gran rendimiento lechero y que están muy bien adaptadas a su medio. Además, estas razas tienen un enorme potencial genético que está aún por desarrollar.
• Existe una demanda constatada de genética caprina española a nivel internacional.
• La leche de cabra es un producto con unas excelentes y reconocidas cualidades nutricionales, y que da lugar a productos elaborados de alta calidad y prestigio, cuya demanda está creciendo a nivel mundial.
• La carne de cabrito lechal posee una gran calidad bromatológica y gastronómica que se acompaña con una buena imagen como producto natural.
• España posee un gran potencial y una gran experiencia en el sector caprino lechero en el ámbito europeo, que aúna en la actualidad tradición e innovación.
• Muchas explotaciones han mejorado sus instalaciones y manejo en los últimos años. El sector en general ha conseguido un gran avance en la última década.
• La ganadería caprina juega un papel ecológico y socioeconómico determinante, tanto en la conservación medioambiental como en el mantenimiento de la población rural en áreas deprimidas.
• En España se conservan sistemas pastorales de producción de leche, que compatibilizan el uso de recursos naturales con unos buenos niveles productivos, excelente marco para permitir al sector desarrollar marcas de calidad diferenciada y estar alineado favorablemente con una PAC previsiblemente cada vez más ambientalista.
• Existen asociaciones de ganaderos, cooperativas, y diferentes grupos que trabajan muy activamente por el progreso y estructuración del sector caprino lechero español.
• La producción científica y técnica relacionada con el caprino de leche español está aumentando sustancialmente en los últimos años, lo que hará posible una transferencia mayor de conocimientos al sector.

Debilidades

• La situación sanitaria de la cabaña caprina es en general deficiente. Persisten aún problemas importantes que limitan la productividad de los rebaños, así como el mercado de genética tanto a nivel nacional como internacional.
• La tecnificación del sector no está generalizada, existen aún explotaciones sin unas adecuadas instalaciones y un manejo deficiente de la alimentación y de la reproducción.
• Se tiene, en general, una alta dependencia externa de la alimentación, con un elevado consumo de concentrados que determinan unos elevados costes de producción.
• Existe una gran diversidad de razas y sistemas de explotación que dificulta la normalización de productos y de acciones técnicas.
• La mayor parte de la leche de cabra producida en España es transformada en quesos de tipo mezcla que no permiten valorizar adecuadamente este producto. Además, se exporta una parte importante de la misma, pero como materia prima sin que genere valor añadido en nuestro país. Hay una evidente falta de capacidad para abordar el mercado internacional en base a quesos de calidad.
• No se han desarrollado las suficientes marcas de calidad para los productos de esta especie. Existen muy pocas DOP de quesos puros de cabra y aún menos IGP de carne de cabrito lechal.
• Existe un consumo bajo de quesos en nuestro país, siendo aún menor el de quesos de cabra de calidad. El consumo de carne de cabrito no para de bajar, siendo ya en muchas zonas testimonial.
• No se ha estructurado una verdadera cadena de valor en el sector caprino lechero español.
• Exceso de burocratización y falta de coordinación entre las diferentes administraciones que dificulta en gran manera el desarrollo de la actividad (Dificultades para el establecimiento de nuevas explotaciones, diferencias en políticas sanitarias y de mejora genética entre las diferentes CCAA, etc.)

Manuel Sánchez.

Director Técnico de Acriflor.

Asociación Nacional de Criadores de Ganado Caprino de Raza Florida.